domingo, 6 de marzo de 2016



MI VENGANZA

Ha vuelto cabizbajo, con el ceño escondido, de nuevo va y viene cual dueño del mundo, rompiendo corazones, imbuido y taciturno, pasajero fecundo.
Mira nada mas cuanto desaliño!, arrepentido y henchido de alegría, retorna a llorar sobre mi pecho, como un afortunado niño.
Ávido por tomarme, esconderse en mi lecho, de renovar nuestro nido, hacer arder la hoguera o tan solo, reiniciar un sutil idilio.
Ja!, de acunarme entre sus corpulentos brazos, como un loco despavorido, todos le han visto, se ha envejecido, cual ocaso dormido.
Algo esconde mi corazón, no, no debo decirle aun, pero mi rechazo, mezclado a tanto amor, es cada día más intenso, pero en mi puerto, ya no es bienvenido.
Sin embargo, una furia extraña se apodera de mi, invitándome a amanecerle, así sea por última vez enjugare mi llanto interno, he de esconderme entre su hombría y a media luz poseerle.
Sorber toda su miel, asirle todo a mi piel, darle forma excelsa a su silueta, sin fin brindarle mi cariño, vivir y saciarme sin reveces, hasta rasgar mi corpiño.
Mientras, de modo quedo, le contemplaba, una idea fija acariciaba mis sentidos, mi interior corroído por su vil engaño era como una película cualquiera, se repetía a cada instante.
Si, solo vivirlo y hacerle sentir lo mismo, musitaba al unísono una y mil palabras!, cuantas cosas podré hacerle, torpe, macho insolente, truhan, infiel y engreído.
En verdad, para que habrá vuelto?, en el mas sutil de los silencios, me pregunto, quien se ha creído?, total!, igual voy a anochecerle.
Tomaré sorbo a sorbo su pudor, sin premura, no tengo prisa, de repente me asalta la risa, jjajajajajaaj, borraré de su rostro aquel rubor, entrelazados, bañados de sudor.
En un mismo riel, con esta musa siempre en frente junto al timonel, una vez cubiertas mis ansias, acunada al alba me iré en silencio, bien cobrada, sin dar vuelta atrás, ni mediar palabras.
A duras pruebas, aprenderá a sentir, como duele la ausencia de un amor, segura estoy, habrá de ser mas fuerte su dolor.
Mientras, llena de satisfacciones pagadas, degustaré con gran sabor, el néctar del sufrimiento que aquel experimentará, cuando se vea perdido, sin mi calor quemándole sus lunas, sin cuna y vacio.
Esa, será mi mejor venganza, resuelta una vieja añoranza, si, eso y mas merece como pago ... a su cruel olvido.
De: Máxima Hernández.© Derechos Reservados de autor.  16/08/1993.

No hay comentarios:

Publicar un comentario